-Méteme, rey, un dedo en el trasero:
cuélame ahora la pieza despacito;
húndela toda bien, que no me quito
y gózame gozando, como quiero.
¡Ay, qué placer! Me matas y me muero;
si esto es pecar, pequémoslo infinito!
¿Quieres meter tu gloria en mi culito
y en el chisme el dedillo traicionero?
-Bien está ya ensartado en el chumino:
la próxima detrás, será riqueza
si es que no me equivoco en el camino.
¡Esto es vivir! Y no los insensatos
que lejos de la cama y de la mesa
pierden el tempo como mentecatos.
¿Que gozar es morir? ¡Bah! Estupideces;
para vosotros la virtud: pazguatos,
por una vez amar… ¡morir cien veces!
-Dejame lo acaricie... ¡Oh, qué tesoro!
Cómo, sin esta joya ser feliz?
Cuando me llena soy... !emperatriz!
¡Verga divina rica como el oro!
Húndete en mí sin miedo, te lo imploro:
Llégame de un envite a la matriz,
que no hay pieza que valga una lombriz
si en la ocasión observa ruin decoro.
-Libro abierto es tu boca, amada mía.
Negarle a buena almena buen envite
es negarle a un enfermo una sangría.
Culos cate quien tenga leve falo:
mas quien goce, cual yo, de un buen retoño,
busque siempre en las vulvas su regalo.
-Dices verdad, que la ilusión del coño
aun las vergas cual ésta que me llena
el conducto que va del papo al moño.
Sonetos lujuriosos, de Pietro Aretino (1492-1557)
El grabado que acompaña a los sonetos es uno de los deliciosos Modi que Giulio Romano realizó para acompañar la edición de los xvi poemas del vate renacentista
En fin, seguimos. En cualquier caso, que disfrutéiiiiis…..
1 comentario:
le compré los sonetos lujuriosos de Aretino en versión bilingue by hiperión a una "amiga" de la cual no sé nada desde hará unos 2 años.
qué puta manera de gastar el dinero y qué arrepentimiento constante, mierda.
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